Subo hoy este artículo escrito y enviado a un periódico local por nuestro amigo José Angel. Refleja sutilmente el civismo y la educación que desprendemos los ciudadanos cuando ejercemos como tales. Habla de Alicante, pero bien podría hablar de Madrid, Barcelona, Valencia...
PEQUEÑA IRONÍA
Es mi intención agradecer sinceramente al Ayuntamiento alicantino y a la Policía Local su enorme apoyo al bienestar social y la convivencia.En los dos años que llevo como residente en la ciudad he podido siempre aparcar mi gran coche en las aceras sin que esos cómodos pilotes de otras ciudades me lo impidieran; nada me ha impedido bloquear los pasos de cebra ya sea durante un rato o toda la noche, yo sé muy bien en qué barrios y a qué horas pasan las grúas, estando la mayoría ocupadas en las calles más céntricas. Gracias al cielo no soy peatón, ni me veo obligado a ir en silla de ruedas, Dios me libre de tal desdicha. Los fines de semana me gusta ir a comprar el pan en moto y, qué quieren que les diga, me encanta circular con el escape libre, adoro el ruido y si a alguien le molesta, pues que se queje. Sí, he oído algo de una ordenanza sobre el ruido pero según parece aquí da igual si no se respeta. Y cuando salgo a pasear mi perro ya no tengo que recoger las heces como en otras ciudades he visto hacer. Aquí forman parte del paisaje urbano, son casi una expresión artística. Y hablando de arte, mis hijos se han convertido en verdaderos artistas del grafitti. No les falta nunca una pared donde poder entrenarse; ¡ay de aquellos pobres chavales a los que se les inhibe su vena creativa! Yo a los míos, cuando los veo muy cansados de ver la tele, los mando al parque a que se emborrachen un poco y se deleiten con el paisaje y los humos opiáceos. Gracias, gracias de verdad por la sociedad que nos dejan construir en Alicante.
Escrito enviado por Jose Angel Dominguez al diario "Información" de Alicante.
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